No se puede ser leal a lo que no te quiere y la única verdad es que la mujer que sabe irse, es la que de verdad logra quedarse.
No necesitamos a alguien que nos espere ni alguien que se haga esperar. Necesitamos alguien que esté. Lo triste es que siempre esperamos que venga un milagro a llenarnos las manos para luego andar huyendo de la realidad que construimos. A mí me gustan los hombres valientes porque son los únicos que realmente saben que hacer con el corazón de una mujer. Amarlo.
Cuando alguien te da muchas oportunidades, no espera que cambies, espera que te quedes y ¿de qué sirve hablar de llegar si nunca aprendiste a quedarte?
Con el paso de los años uno madura y deja de pedirle favores al tiempo y al olvido.
Uno ya deja de pedir cuando se da cuenta que empieza a merecer y a duras penas, uno aprende que estar solo y convivir con uno mismo, es mil veces más difícil que convivir con los demás. Uno cultiva un jardín en su alma y planta sus flores en lugar de esperar que alguien más te las traiga. Uno le dice adiós a la persona y no al amor.
Uno sabe que hay dos tipos de finales: los felices y los necesarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario